Toma un minuto y piensa antes de actuar,
a veces todo sucede a una infinita velocidad.
Los segundos pasan y tienes tantas cosas que hacer,
desearías dividirte en mil pedazos una y otra vez.
Las lágrimas recorren tu rostro ,y te preguntas si lo que haces es correcto,
caminar con una visión nublada parece ser la solución del momento.
Así tu cabeza explote, sabes que tienes que continuar,
la presión del día a día es algo que tienes que afrontar.
Tantas personas que esperan algo de ti,
solo hace que lluevan más lágrimas,
que aquella presión en el pecho llegue hasta tu alma.
Te sientes solo y los nervios inundan tus días,
hay que lidiar con ellos, estos forman parte de la vida.
Toma este minuto y aprovéchalo para llorar,
luego que termine , respira y comienza a trabajar.
S.Fuchs